viernes, 14 de septiembre de 2012

Jornada Pro-vida 2012


La Delegación de familia y el apostolado Diocesano Pro-vida, actualmente adelantan una campaña de sensiblización sobre la defensa, respeto y amor a la vida humana, con el mensaje principal “Yo he venido para que tengan vida y la tengan en abundancia” (Jn 10,10b)”; con el fin de fortalecer esta campaña, el pasado 13 de septiembre de 2012, se realizó la II jornada Pro-vida en el auditorio  de la catedra de San Nicolás, de 08:00 am a 12:00 pm.

Este año, la  Jornada Pro-vida, se orientó a realizar una reflexión en torno al día mundial de la Prevención del suicidio, que se celebró el pasado  10 de septiembre a nivel mundial; sin embargo  se profundizó sobre el  sentido de la vida, desde la Enciclica Evangelio de la Vida de Juan Pablo II. y a partir de un enfoque existencialista y transpersonal. Asistieron representantes de diferentes municipios, entre ellos: Cocorna, Marinilla, Guarne, Rionegro, entre otros.
Se concluyó que la defensa de la vida es permanente y todos estamos llamados a comprometernos con la labor y a extender la cultura de la vida en nuestra comunidad, desde el testimonio de vida y con acciones claras que permitan promoverla, amarla y respetarla desde la concepción hasta su fin natural.
Queda como compromiso llevar el mensaje de la vida a instituciones educativas, para llegar a los jovenes y motivarlos para que se apropien de la defensa y amor a la vida. Iguamente se identificó la necesidad de seguir fortaleciendo espacios para la formación y la socialización que permitan orientar la comunidad sobre






2 comentarios:

  1. ¡Hombre, sé valiente, apoya y defiende a la mujer que lleva a tu hijo en el vientre!

    Fuente: http://colombiaprovida.blogspot.com/2010/05/frases-pro-vida.html

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  2. "Dios, Señor de la vida, ha confiado a los hombres la insigne misión de proteger la vida, que se ha de llevar a cabo de un modo digno del hombre. Por ello, la vida ya concebida ha de ser salvaguardada con extremados cuidados; el aborto y el infanticidio son crímenes abominables". Concilio Vaticano II

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